Damos la Gloria a nuestro Bendito Padre Celestial quien nos permitió compartir un tiempo maravilloso en su presencia, este primer encuentro de libertad en Cristo para Hombres y Mujeres fue un exito total, nos gozamos, nos divertimos y se alegro nuestro corazón, los rostros se hermosearon pero sobre todo los corazones fueron sanados y restaurados por la palabra de Dios.
Levantamos bandera de victoria en Cristo Jesús, porque su luz ha resplandecido en nuestras vidas.