La frase del Mes

Tu vida no esta limitada por el lugar donde te encuentras en este momento sino por la visión que tienes para tu vida. "No es el lugar, es la visión".

Quienes Somos



La Iglesia Alianza Cristiana y Misionera Colombiana del Socorro tiene como propósito llevar la palabra de Dios, hacer discipulos con el caracter de Cristo y servir a la comunidad del Socorro y los municipios aledaños. La iglesia es liderada por el Pastor Ivan Bonilla y su esposa La pastora Ludy Constanza Diaz, quienes agradecen a Dios el privilegio de Liderar la congregación junto a sus tres hijos Maria Angelica, Iván Felipe y Daniel Esteban.   








VISIÓN
La IAC&MC se proyecta como una Iglesia saludable a nivel espiritual y emocional; consolidada en lo ministerial y administrativo, desarrollando procesos orientados al mejoramiento continuo, por medio de la implementación de herramientas de gestión aplicadas a todos los niveles; con personal idóneo, capacitado, competente y comprometido en el logro de los objetivos, que satisfaga las expectativas de crecimiento integral de la Iglesia y la comunidad, como resultado de la gestión evangelistica, ministerial, administrativa y social.

2.    MISIÓN
Somos una comunidad cristiana comprometida con el evangelio Cristo Céntrico de transformación integral, dedicada a la evangelización, el discipulado y la formación de líderes; fundamentada en los principios de la palabra de Dios; estructurada, dinámica, reflexiva, transparente y abierta a los cambios sin perder su identidad; que realiza su gestión con hombres y mujeres capacitados y comprometidos con el mejoramiento continuo e integral de la Iglesia y de la comunidad en general.


DECLARACIÓN DE PROPÓSITO DE LA IGLESIA LOCAL

IAC&MC GDR (Generación del Reino de Dios) Sede Socorro, Somos una comunidad cristiana y comprometida en la extensión del reino de Dios sobre la tierra, fundamentada en los principios de la Palabra de Dios,  dedicada a  la evangelización, consolidación y la formación de discípulos misioneros, que realiza su gestión con hombres y mujeres capacitados y comprometidos con la transformación y el mejoramiento continuo e integral de los miembros de la Iglesia.


Nos proyectamos al 2018 como una iglesia comprometida en la edificación y plantación de otras iglesias de la IAC&MC en Santander y Boyacá, apoyando con todos los recursos disponibles en la formación y capacitación de misioneros dispuestos a extender el reino de Dios alrededor del mundo.

3.    VALORES INSTITUCIONALES
Son aquellos principios que regulan fundamentan y direccionan el quehacer de nuestra institución Iglesia Alianza Cristiana y Misionera Colombiana. Entre los cuales tenemos:

3.1  El temor a Dios como principio de sabiduría y dependencia Divina
3.2  Amor a Dios y al prójimo: Como parte de hacer práctico el mensaje que predicamos
3.3  Las Sagradas escrituras: Como máxima autoridad de fe y conducta
3.4  La Unidad familiar como base de la sociedad.
3.5  El orden: Porque entendemos que Dios es Dios de orden y además hace parte de nuestro testimonio hacia afuera y hacia adentro.
3.6  La verdad: Siendo coherentes entre lo que se piensa, se dice y se hace.
3.7  La Innovación: Como parte de un mejoramiento.
3.8  La lealtad: Como fundamento del sentido de pertenencia y compromiso institucional
3.9  Respeto: A Dios y a las autoridades establecidas por Él.
3.10     Perseverancia: Viviendo procesos y superando obstáculos.

ESTRATEGIA






Reverendo Alberto Benjamin Simpson
Nuestro fundador, el Rev. Alberto Benjamín Simpson

La Alianza Cristiana y Misionera debe su existencia a la visión de Alberto Benjamín Simpson (1843-1919), un ministro presbiteriano que abandonó una acaudalada congregación en Nueva York para pastorear, en cambio, las masas desposeídas de esa misma ciudad.

Según describe el propio Simpson: "...Por lo tanto, después de tres años de gran compañerismo y perfecto entendimiento con estas queridas personas, y sin que mediasen desacuerdos de ninguna clase, les dije francamente que Dios me llamaba para un trabajo diferente, y pedí al Presbiterio de Nueva York que me dejase en libertad con el propósito de llevar el evangelio a las masas" (A. E. Thompson, A. B. Simpson, His Life and Work, Christian Publications.)

Alberto Benjamín Simpson nació en la Isla Prince Edward (Canadá) el 15 de Diciembre de 1843. Fue dedicado al Señor mediante las oraciones de John Geddie, el pastor de la familia, quien fuera él mismo, más tarde, un gran misionero conocido por su labor en las islas Nuevas Hébridas, en el Pacífico Sur.

En 1847, la familia Simpson se trasladó a la provincia de Ontario, donde adquirieron una granja. Allí, Alberto recibió la influencia espiritual de la estricta tradición calvinista y puritana de la Iglesia Presbiteriana Escocesa, influencia que fue balanceada por la lectura de la obra de Walter Marshall acerca del Misterio Evangélico de la Salvación, la que llevó a este joven de 15 años a comprender los conceptos de salvación y de santificación cristianos.

Al terminar sus estudios escolares, hizo clases durante un tiempo, con el fin de reunir el dinero necesario para poder matricularse en el Colegio Knox de la Universidad de Toronto, graduándose a los 21 años, luego de lo cual fue recibido como pastor de la Iglesia Presbiteriana de Knox, en Hamilton, Ontario.

Después de ocho años de ministerio exitoso y de haber ganado 750 nuevos miembros para su iglesia, se decía de él que era mejor que ningún otro en cuanto a elocuencia, habilidad y éxito en su labor ministerial. (A. E. Thompson, A. B. Simpson, His Life and Work, Christian Publications.)

A la edad de 32 años, en Diciembre de 1875, Simpson fue llamado a ocupar el púlpito de la mayor iglesia presbiteriana de Louisville, Kentucky, la iglesia presbiteriana de la calle Chestnut. Allí se embarcó en un esfuerzo evangelistico a nivel de toda la ciudad, que le sirvió para apreciar la trascendencia del ministerio evangelistico.

Al cabo de cinco años allí, su atención fue atraída por las masas de inmigrantes recién llegados a la ciudad de Nueva York, fundando una misión junto a las puertas de la Iglesia Presbiteriana de la calle Trece, donde, después da haber llevado hasta el Señor una cantidad de más o menos 100 inmigrantes italianos, la congregación le sugirió que buscara otra parte para proseguir este ministerio. En consecuencia, Simpson, dándose cuenta que Dios lo llamaba a un "ministerio diferente", dejó su cargo para dedicarse de lleno a su labor con las masas de Nueva York.

El llamado de Dios en la vida de A. B. Simpson dio como resultado una doble visión. Por una parte, su concepto de la totalidad y de la centralidad de Cristo en la doctrina, dio origen a lo que ha sido llamado el "evangelio cuádruple" : Jesucristo es nuestro Salvador, Santificador, Sanador y el Rey que viene, fórmula que es compartida también por las Asambleas de Dios y por las iglesias del Evangelio Cuádruple.

En segundo lugar, la visión de las almas perdidas y de la gente que perece sin Cristo, le impulsó a enviar los primeros equipos de misioneros al Congo. La creencia y la estrategia de Simpson era hacer que las personas llenas del Espíritu Santo se convirtieran en siervos activos de la obra del Señor.

El resultado de estas dos visones fue el desarrollo de un mensaje centrado en Cristo y en la extensión del ministerio más allá de la iglesia local en lo que hoy día es la Alianza Cristiana y Misionera.